Bichos, bichos, bichos… Aviso a tripulantes!!!! otro día sin moto
La experiencia en el Kalahari había sido TOTAL, y para esta ocasión, con un día en el parque pensamos que no nos haría falta guía, siempre viene bien, desde luego, pero suponía un gran desembolso, frente a los 45 euros que nos costaba alquilar el coche; además se trata del “Addo Elephant Park” y coño, los elefantes no van a esconderse fácilmente
De buena mañana nos dirigimos a por el coche que teníamos alquilado en el aeropuerto que nos pillaba cerquita, la idea original era coger una pick-up, para camuflarnos entre los lugareños, pero la cosa se nos fue de las manos y acabamos con esta joya que para el uso del día era más que suficiente
Primero de todo paramos en el super a por algo de bebercio y de comercio, que ya habíamos aprendido que las horas de safari pueden hacerse muy largas, y siempre viene bien estar hidratados y alimentados, y por si algún animalillo se nos quería subir en el vehículo convenía tener algo arrojadizo para entretenerlo, que por aquí también hay leones a la caza.
El parque es más pequeño en extensión que el Kalahari, pero también tiene sus buenas distancias, ya que cada elefante necesita muchas hectáreas para poder alimentarse, arrasan una zona y van a otra y luego a otra, y cuando vuelven a la primera la hierba ya ha crecido. Cogimos un mapa del parque y nos lanzamos a la aventura, tan sólo hay que respetar el límite de velocidad genérico de 40 km/h y hacerse un recorrido según indica el mapa por los caminos habilitados a tal efecto. Y parando en los bebederos que siempre hay bichos. No hay mucho visitante así que se hace muy agradable el recorrido. Nos topamos con algún animalillo en los arboles
Algún Pumba
Cebras pendientes del coyote, se respeta la hora del almuerzo, pero no te fíes, porque tú puedes ser el almuerzo.
Yo acabaría cenando una de estas
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, pero otro día, ahora me siento culpable 
Y por fin nuestro objetivo del día, empieza a hacerse plausible, no hay duda de que no muy lejos se camuflan de nuestros ojos esos impresionantes animales
Tras detenernos en un auténtico Paso de Cebras, este no resbala
Vemos un paquidermo a lo lejos, nuestros corazones se disparan, pero ni con los prismáticos lo acabamos de apreciar en toda su inmensidad, así que toca seguir avanzando hasta acercarnos lo suficiente.
Se trata de un curioso ejemplar de 6 patas 6, se le ve orgullo y con una amplia sonrisa, creo que viene de alguna fiesta privada.
Seguimos avanzando y vemos cómo un par de majestuosos animales se acercan un Waterhole (bebedero), estamos solos así que tomamos posiciones porque tienen toda la pinta de venir directos a beber agua, y efectivamente comienza el espectáculo de la naturaleza, en apenas 5 minutos y sin haber quedado previamente por Whatsapp
, se reúnen delante de nuestro Nissan unos 35 elefantes 
que se turnan para beber, pelear, frotarse, incluso algún pequeñín, para amamantarse, que todavía la hierba le sienta mal. IMPRESIONANTE, os dejo unas fotos porque es algo inenarrable 
Tras una hora sin dejar de disfrutar, habiendo sacado cientos de fotos y grabado vídeos decidimos dejarles a su aire, y seguir viendo animales, que lo hay y muchos por todos lados.
Estos me los imagino tirando de una piedra enorme y ganando apuestas en las idi probak
Satisfecha nuestra necesidad de grandes paquidermos abandonamos con pena, no sin antes echar una última mirada
Vuelta al Backpackers y otro maravilloso día en Sudáfrica, ya van quedando menos, y queremos disfrutar cada minuto, nos echamos de nuevo a la calle en Port Elisabeth para disfrutar de su ambiente cerca de la playa y los garitos surferos que nos encontramos.
A pesar de lo visto y vivido hoy, todavía nos queda en la cartera algún mamífero más grande por ver, y vendrán a nuestro encuentro……
Confío no aburrir al personal, yo personalmente estoy gozando
, y estaban muy cerca pero deben estar acostumbrados porque el coche sonaba de lo lindo.
, suponemos que nos saludan y les gustaría haber evolucionado más rápido 
, de momento tendrán que contentarse con esperar a ver si les toca una GS en suerte 
, no es un parque de animales, aunque también los hay, pero este es para ir a patearse la costa, no disponemos de tiempo y nos tenemos que conformar con una pequeña excursión por el acantilado, pasando por los famosos puentes colgantes, lástima no disponer de un par de meses libres y la financiación necesaria 
, y tendrán que buscar los clientes por otro lado, aunque no les faltan, es un continuo. 
pero es que entre que nadie aflojaba y la altura a la que se encontraba, por encima de los tres metros, sólo me dio tiempo a sentir el flashazo en la cara. Al tomar la foto de frente la matrícula no salió, y me temo que todavía están buscando a un blanquito motorizado 
, un pequeño cartel de No Pasar no va a pararnos a estas alturas :-D, el Garmin dice no saber dónde estamos y desaparece toda muestra de civilización en su pantalla, una zona oscura, sin embargo el mapa de papel no nos defrauda y vemos la carretera que sigue avanzando hasta un pueblecito, lamentablemente el segundo cartel que avisa viene acompañado de un muro de 3 metros de alto, y ante la imposibilidad de comunicarnos con el interior nos resignamos a darnos la vuelta. 
, ¿he perdido técnica? Noooo el caso es que tiene doble chapa la botella, tras un leve corte en la mano por fin me hago con ella. Recordad que estamos en un arenal y no hay nada sólido en varios kilómetros a la redonda, habría que volver al parking y aprovechar la moto, y no es plan.
cada 5 minutos vemos que un par de ellas vienen del Este y nadan hacia el oeste, todo un 
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