
Que razón tenía el puñetero Hobbit; sueñas que un día vas por una recta interminable cruzando el desierto, un coyote te mira desde el arcén, un Mack de 18 toneladas brilla al sol, paras en un "diner" donde una camarera te echa café y te ofrece huevos con panceta...
Amigo, no sueñes mucho que puede convertirse en realidad; eso me pasó a mí, y esta es la crónica.

Para los que nos gusta quemar aceite este es uno de "los viajes", rondaba mi cabeza hace años y en este 2011 una alineación cósmica de grado alfa hizo posible el milagro de tener los tres deseos del genio de la botella, a saber: tener a quien enchufar a las tres criaturas, tener los permisos laborales y el mas fácil... tener la pasta.
Mi mujer y yo solos en la llanura, ¿solos? ni pa la ostia. Ocurre amigos que los sueños son contagiosos, y en un pis pas éramos cuatro motos y ocho puretas dispuestos a todo.

La moto
Si algo estaba claro era que la moto debía ser una Harley, era parte del sueño; en nuestro caso cuatro maravillosas Electra Glide Classic. Acierto total; son calentonas, te vibran hasta los empastes, torpes en parado, frenan lo justito, beben en plan alcohólico terminal...pero cuando el bicilíndrico empieza a hacer su run run run run run run run en sexta, o le apretujas la oreja en segunda y empieza a cantar el escape..es el puto nirvana; comodísima de posición y tragamillas insaciable, sus propiedades deportivas eso sí, son...cero! rasca con una facilidad preocupante..pero es cierto, tienen algo, transmiten alma...hacen que la sonrisa de oreja a oreja bajo el casco no desaparezca mientras tragas millas y para mí eso es mucho, son motos con M mayúscula.

La Ruta
Después de mucho mirar, básicamente haríamos unos 4.700 km; las primeras etapas Californianas siguiendo la ruta 66 o lo que queda de ella y después el gran cañón del Colorado y Monument Valley en Arizona, los parques de Zion y Bryce, seguimos hacia Nevada y Las Vegas volviendo de nuevo a California para hacer Death Valley, San Francisco y los 800 km de la Big Sur hasta L.A...todo en 9 días.
El Clima
Siendo este año la semana santa tan tardía y como íbamos al desierto se suponía pasaríamos calor...no he pasado tanto frío ni en pingüinos, aviso a navegantes, ropa térmica y traje de agua imprescindibles en primavera. En Bryce nos nevó y en San Francisco casi muero en el intento y eso que mis reservas de grasa son parecidas a las de los leones marinos del pier 39 ... avisados estáis.
La aproximación
El vuelo es un coñazo, para que nos vamos a engañar; 12 horas desde Madrid suplicando a los azafatos un sandwich gomoso y esas ridículas coca-colas con un tamaño pin-y-pon que para el primer sorbo ya te la has acabado. A la vuelta encima con hora y media de retraso y todo por el módico precio de 750 leuros, luego dicen que las motos son peligrosas....

Nos alojamos en el hotel Travelodge, cerquita del aeropuerto de Los Ángeles y de Eaglerider donde alquilamos las motos, aprovechamos la tarde para dar un paseo en limusina hasta Santa Mónica, hacía un frío del carajo...normal que no viera por allí a las vigilantes de la playa, estarían en casa con jersey de lana descojonandose de los turistas...

algunos somos de Bilbao y lo de la limusina es normal para nosotros, jeje, peazo pose...


Día 1: LA-Needles 415 km
http://maps.google.es/maps/ms?hl=es&ie= ... f5603b&z=8
¡que emoción! vamos a por las motos (unos 100 €/día con todos los seguros) algunos llevamos los cascos desde casa y algún que otro se atrevió con las "escupideras" que te dejan en Eaglerider. He de decir que fueron muy profesionales en el proceso, rápido y fácil. Las motos semi nuevas, la gris marcaba 1 milla !!!

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en este punto me gustaría puntualizar que el amigo tomtom ha sido imprescindible, nos ha sacado de todas bien, y en la autopista angelina te hace falta, mínimo de seis carriles, te adelantan por la derecha, por la izquierda, camiones a toda leche..en fin hay que vivirlo.


salimos ya en dirección al desierto del Mojave, es inmenso, con sus árboles de Joshua, llega mas allá de Las Vegas, parte de Arizona..en fin, inacabable.

En todas partes mercachifles de Ruta 66 pero de la ruta original poco, pasando Barstow, paramos a comer en el famoso Bagdad Café con sus hamburguesas de Búfalo.


entre los nativos del lugar aparece de vez en cuando un personaje: el chotao de la ruta, aquí tenéis un ejemplo


al final, foto en la barra, los dueños majísimos

llegamos a Needles con el tiempo justo de pedir unas pizzas y al sobre, el día había sido largo e intenso.