Al tema. Hace menos de dos meses que compré a un particular una Tiger 800 de abril de 2016, la cual tenía 2+2 años de garantía. La moto tenía ya más de 50.000 km.
La moto era lo que esperaba de ella, iba muy bien y realmente estaba contento con ella. Con el tiempo que tenemos en enero por Pamplona tampoco la había podido usar mucho.
El caso es que tras una salida, mientras me despedía de un compañero con la moto en marcha, me sale una nube de vapor de la zona del radiador. Miro a ver qué era y me encuentro con que tengo una fuga, supongo que un poro.
Marronazo. Me entero de que un radiador nuevo vale (o cuesta, 700€).
Bueno, tengo una cosa a mi favor: para los cuatro años de garantía me quedan 2 meses. Vamos a probar. En mi pueblo no hay concesionario oficial. Putada porque vete con la moto con el radiador tocado hasta cualquiera de los más cercanos, Bilbao o Zaragoza.
Vamos a probar con Bilbao. Me atiende Alfonso. Me dice que no hace falta llevarle la moto allí, que con que le mande unas fotos es suficiente¡¡¡¡
Comprueba que la moto ha sido mantenida en Triumph a lo largo de estos años. Tras ver las fotos que le mando, me dice que no hay problema, que va a tramitar la garantía, que no es con Triumph directamente sino con una casa de seguros. A mí esto me da bastante igual, jaja...
También me da a elegir ir hasta Bilbao para que ellos me cambien el radiador o mandármelo a Pamplona, para que me lo cambien aquí en mi taller de confianza o incluso me lo cambie yo.
Resultado final: en el día de hoy, 12 días justos después de iniciar el proceso, me ha llegado a casa un radiador nuevo.


Estoy realmente contento y satisfecho. Alguno me dirá que ha ocurrido lo que tenía que ocurrir, pero qué queréis que os diga. Con todo lo que se oye y se lee por ahí tenía serias dudas sobre cómo acabaría esto y realmente no puedo estar más satisfecho. El trato de esta empresa hacia mí ha sido ejemplar, me he sentido tratado como un consumidor europeo.
Si la garantía Triumph funciona siempre así, chapeau¡¡
Saludos y perdón por el ladrillo que os acabo de meter...