No es solo cuestión de precios, o de tecnología, o de concesionarios que desaparecen. Son también los modelos que surgen frente a los que se aniquilan de los catálogos. Por circunstancias, tengo que usar más el coche de lo que lo he usado jamás, porque lo odio. El caso es que al meterle 25 mil km al año al coche, me voy fijando en los anuncios y en los precios porque más pronto que tarde me tocará. Ayer me dieron un flyer con un Vitara por 14700 euros, dándose la coyuntura de que ese es un precio 300 euros por debajo del de la Africa Twin que me dieron en concesionario, y que financiado se iba a 18 mil pavos. Amos, quiero decir, que sumabas la entrada, las cuotas mensuales y la final y pagabas tres kilos, 18 mil euros. A mi me parece que antes, los coches eran mucho más caros que las motos. Y me parece que esa relación entre ambos, estaba justificada por una sencilla correspondencia entre los gastos del proceso de fabricación entre uno y otro vehículo.
Así que lo de ahora me lo estoy perdiendo. Igual que me pierdo que una moto valga más que un coche pintón, me pierdo en la sensación de que 15 mil por una moto pintona, encima, no es tan caro. Dicen que hay motos por ahí de 25 mil
Me produce una sensación muy rara que Kawa, Honda y Suzuki hayan exterminado, hayan extirpado de sus catálogos a las deportivas 600cc (Parece que Yamaha conserva la r6). Olvídense de las gsxr, la zxr y la cbr 600. Ahora si quieren una deportiva tiene que ser una mil. Peeeero, pueden encontrar, respectivamente, motos de aventura de 250cc (300cc en el caso de Kawa) a seis mil euros. Es decir, al precio que, en 2005, me parecía alarmante para una moto de aventura de casi 700cc, la xt 660.En esta casa leí que Palmeto en Málaga se quitaba Triumph. Pasé por delante el otro día y lo corroboré. Han estirado el logo de kawa, que estaba justo al lado, y ahora ocupa también el lugar en el que antes estaba la británica. Lo peor es que habrá sido como una especie de matrimonio de conveniencia, uno que tienes que vender x motos al mes, otro que mira que a mí no me presiones que te mando a coger habas que yo estoy muy cómodo con las verdes. Y al que se haya comprado hace tres meses una Explorer de 20 mil pavos, que es el que debería tener derechos, que es el que se ha gastado la pasta, ese... que se busque la vida. Que se vaya a Marbella a pasar revisiones.
En fin que yo sé que me hago viejo y tal, pero que veo unas cosas muy raras, y veo que aún así seguimos comprando motos, aunque claro, cada vez menos. Porque yo veo mucha moto vieja, amos, vieja para ellos, quiero decir mucha moto cuya matrícula empieza por F. Veo que la gente con motos buenas, y viejas, empieza a cuidar sus motos, que son buenas y viejas, porque ven que las nuevas, que son nuevas, encima pueden no ser buenas. Ven que el precio estándar fijado en una moto de 600cc hacia arriba ya no son seis mil, mil arriba mil abajo, sino diez mil, con mil más arriba que abajo. Y la gente, que al final no es rica, ni tonta, empieza a mirar más a su garaje o al milanuncios que a los escaparates. Mientras los de las tiendas, que oiga a mi no me pregunte esas cosas que yo no estoy aquí de analista de mercado, sino de experto financiero en cuotas imposibles e invisibles, yo estoy aquí para vender motos, solo... los de las tiendas están vendiendo motos como podían estar dando créditos en un banco o pintando fachadas de edificios públicos. También testigos mudos, como los propios clientes.
Vamos, que veo yo que esto de las motos al final se va a convertir en un lujo tipo los barcos, al alcance de muy pocos, y pivotando sobre un eje que tiene muy poco que ver con la pasión y el sentimiento de libertad. Que ahora se va a basar en otras cosas, que va a ser como más completo. Y que quien nos va a dictar las nuevas normas del juego, quien nos va a decir qué nos hace falta, ya no somos nosotros. Estaremos atentos.
Si te tienes que acercar para diferenciar una moto de otra! 
