Me auto, o mejor dicho me amoto respondo...
No sé si es que nadie la conoce, 77 visitas y ningún comentario sobre tan emblemática moto de Triumph...
Nació en la época dura en que Japón arrasó los mercados y las marcas europeas cayeron en decandencia, creo que Triumph fue la única marca que estuvo, momentaneamente, a la altura de la técnica del momento con su Trident, hizo muy buen papel en las competiciones de resistencia.
En el Bol D'or una Trident fue bautizada con el apodo de Slippery Sam, (la escurridiza) por una pérdida de aceite, lo que produjó un baño de aceite a la moto y al piloto, el mécanico encargado de "secar" la moto y piloto fue el que le colocó el apodo.
"The machine, which was on display at the National Motorcycle Museum", a causa de un incendio acabó totalmente destruida, con la fortuna de recuprerla tras una exitosa restauración ...
De este modelo pero con chasís americano surgieron las Trident y BSA que corrieron Daytona 200 con gran éxito.
Bueno más o menos esta es la historia de Slippery Sam, cuando esta máquina rompía el silencio y cortaba el aire, las Honda Four y las Kawa KZ eran sus competidoras.... cuando yo era un niño.
Años más tarde tuve la ocasión de comtemplar en un escaparate de Madrid una, más o menos réplica, que parecía venir directa de Montjuic, también recuerdo la primera vez que pude observar una Trident con los hierros calientes y olor a aceite retostao, fue en el Puerto de Los Cotos una tarde de sábado que nosotros rodábamos por los puertos con la Vento 350..., siempre me ha gustado esa moto.
Ahora que tengo una tricilíndrica, la segunda, la primera fue la Laverda 1000 3C, ahora que tengo la Daytona, puede parecer una herejía, me siento cómo si mi sueño de la Trident se haya hecho realidad, más moderna, más técnica..., me siento como un tío con una DUCATI 916 se puede sentir al observar una 900 SS o Darmah..., no hay aletas de refrigeración por aire, no hay carburadores grandes..., pero..., la herencia está ahí.
Pues que me apetecía hacer un homenaje a la madre de las Daytona, y que mejor lugar que en un Club, virtual, de la marca Triumph.
No soy un historiador de la moto, sólo ofrezco lo leido en la red, para, cómo he dicho rendir homenaje a la legendaria SLIPPERY SAM.
PD, me encantaría ser corregido y saber más de Slippery Sam.